Foodies Barcelona es un restaurante especializado en comida sana ubicado en el conocido distrito 22@ de Barcelona. Originalmente, este local era un restaurante asiático, con una decoración muy tradicional y con iluminación muy atenuada.
El Reto, la transformación del local en un lugar luminoso, fresco y que transmitiera la sensación de un lugar “verde” y sano a los clientes del local, fiel al espíritu de los propietarios del local, que buscan transmitir un ambiente saludable, luminoso y muy natural.
Las presencia de las plantas como elementos decorativos son una constante en este proyecto. Los jardines verticales aportan frescura y color a los espacios, llenando grandes superficies de las paredes con pequeñas plantas de interiores. El resultado es diferente y original. Las macetas cuelgan de la pared con un mallazo metálico reutilizado y, gracias a las cuadrículas, pueden combinarse las plantas con otros elementos decorativos.
El aprovechamiento de materiales es también un elemento importante de la decoración. Conjugar mesas y sillas de diferentes estilos, equilibrados con elementos de iluminación de toque industrial, aportan un toque especial a este local.
Esta gran estantería realizada en varillas de hierro combinado con alistonados de madera de roble, son parte de un elemento decorativo versátil, proyectado para ser utilizado como un jardín vertical, o como de expositor para eventos realizados en el local.
Los detalles de decoración incluyen la reutilización de materiales, como el caso de este mallazo metálico, transformado en un elemento esencial en los jardines verticales que caracterizan la decoración de este local.
Los jardines verticales son un elemento que aporta frescura y naturalidad a los ambientes de este local, reflejando perfectamente la intención de los propietarios y alineado con la comida sana y natural.
El mural ha sido diseñado especialmente para este local. El diseño gráfico refuerza la sensación de frescura y naturalidad del ambiente que se ha proyectado, contrastando de una manera equilibrada los colores utilizados en el concepto de interiorismo. El contraste entre los matices de color verde con los colores de las flores (fuscia y blanco) convierten esta pared en una fuente de color y alegría en el conjunto de este espacio, ubicado detrás de la plancha Wok del restaurante.
La barra ha sido diseñada como producto para este espacio. Tiene la funcionalidad de servir como una barra cerrada y accesible solo desde el interior de la misma; así como para estar abierto como Salad Bar o Self Service. El verde utilizado es un color que aporta luz y naturalidad a esta importante área del restaurante.
Las estanterías detrás de la barra mantienen el mismo estilo de la gran estantería del salón: varillas de hierro y alistonados de madera de roble, proporcionando un amplio espacio de almacenamiento de enseres y de elementos decorativos, que lo convierten en un mueble funcional, útil y diferente.